La diabetes es una patología metabólica, que predomina con un alto porcentaje de personas afectadas, en América y el mundo entero. Según la OMS su informe actual describe que 62 mil millones de personas en América padecen de diabetes Mellitus, y agrega que para el 2040 se aproxima una cantidad de 119 mil millones de personas.

La descripción epidemiológica de la diabetes en el embrazo, se observa de dos maneras diferentes, como diabetes pregestacional y diabetes gestacional.

Antes de especificar como estos factores pueden afectar el periodo de gestión, debemos definir qué es la diabetes y cómo afecta el organismo.

Esta enfermedad produce en el cuerpo la dificultad de procesar el azúcar, obtenido de los alimentos, para convertirla en insulina la hormona que regula el azúcar en la sangre o glucosa, por medio del páncreas, órgano que ejecuta este proceso.

Diabetes pregestacional

Las mujeres en gestación con diabetes preexistente o pregestacional son aquellas que padecían de diabetes antes de quedar embazadas, esto no significa que su trayecto en el crecimiento fetal pueda estar afectado, siempre y cuando se maneje la patología reduciendo sus riesgos de complicaciones.

La diabetes sin tratar siempre será un factor de riesgo, para cualquier organismo en este caso para las mamás y los bebés. El chequeo en este tipo de casos para el cuidado  prenatal, debe hacer con mayor frecuencia para salvaguardar cualquier eventualidad.

Tipos de diabetes preexistentes

Diabetes tipo 1

Este tipo de diabetes ocasiona en el cuerpo, específicamente en el páncreas, una deficiente producción de insulina, para el organismo volviendo a la persona insulinodependiente, comúnmente se desarrolla en la infancia o la adolescencia y requiere de tratamiento durante toda su vida.

Diabetes tipo 2

En la diabetes tipo 2 el organismo presenta una utilización ineficaz de la insulina para procesar la glucosa, esto se puede ocasionar en la mayoría de los casos por la falta de actividad física y la obesidad abdominal.

Diabetes gestacional  

La diabetes gestacional se diagnostica por primera vez durante el embarazo, con pruebas de detección prenatal, el cuerpo no se altera de la misma forma como en los distintitos tipos diabetes, ya que no hay carencia de insulina, en cambio se puede decir que hay resistencia de insulina, por los efectos que bloquean las hormonas de insulina producidas, debido al aumento de la azúcar en sangre o hiperglucemia. 

Síntomas y causas

Durante el embarazo el cuerpo cambia de manera significativa, produciendo hormonas especiales para la concepción, también puede alterar el peso y puede contrarrestar algunos procesos frecuentes de órganos.

En este caso la causa presente, es la intolerancia a los hidratos de carbonos y el aumento de la secreción de la insulina, provocando los siguientes síntomas:

• Pérdida de peso.
• Aumento de sed.
• Visión borrosa.
• Náuseas y vómitos.
• Infecciones de vejiga.
• Infecciones de vagina.
• Infecciones de piel.

Diagnóstico y exámenes

El diagnostico se realiza en la consulta prenatal, probablemente con un examen de detección durante el segundo trimestre, semanas 24 y 28 del embarazo.

A su vez se evalúa todos los factores que puedan determinar este tipo de afección, con los antecedentes del paciente, obesidad antes del embarazo, familiares con algún tipo de diabetes, o si ya anteriormente se presentó algún tipo de diabetes en algún embarazo.

Exámenes de rutina para la detección de diabetes:

Los exámenes de rutina pueden varias según la atención médica, los más comunes son:

• Exposición de glucosa, prueba inicial.
• Tolerancia oral a la glucosa, estudios de seguimiento.

Riesgos de la diabetes durante el embarazo

La forma como cuidamos nuestro cuerpo siempre determinará nuestro estado de salud, cuando presentamos alguna patología, producida por efectos internos de nuestro funcionamiento, o alterado por algún evento evolutivo.

Se presentará riesgos asociados a este entorno, por efecto en este caso, un periodo de gestación asociados con afecciones de diabetes. Sin embargo, la diabetes pregestacional y gestacional cuando no son controladas, puede provocar problemas de salud para ambos.

Riesgos asociados que pueden afectar a la madre:

• Presión arterial alta, a consecuencia de preclamsia.
• Diabetes futura, en el caso de la diabetes gestacional.
• Dificultades en el parto por el tamaño del bebé.
• Riesgos asociados que pueden afectar al bebé:
• Parto prematuro.
• Obesidad en su infancia y adolescencia.
• Dificultad respiratoria.
• Exceso de peso al nacer.
• Niveles bajos de azúcar en sangre.
• Perdida del embarazo.

Tratamientos

Para evitar posibles complicaciones en los niveles de glucosa sanguínea, se describirá los posibles tratamientos.

Cambios para un estilo de vida saludable

Una alimentación saludable y la actividad física impactaran de manera significa el estado de ánimo del individuo, y a su vez evitara el descontrol de los signos que desencadenan esta enfermedad.

Vigilancia de la glucosa sanguínea

El control de la glucosa sanguínea se deberá llevar a cabo, con una revisión de cuatro veces al día una a la primera hora y después de cada comida.

Fármacos, en casos necesarios

Dependiendo del tipo de diabetes, presente en el tiempo de gestación la utilización de medicamentos variara según sus requerimientos.

Bebé de madre diabética

Las complicaciones que se pueden presentar en el neonato, cuando es hijo de madre con diabetes van a variar dependiendo del control metabólico durante la gestación. Las complicaciones presentes pueden ser:

• Hipoglucemia.
• Hipocalcemia.
• Inmadurez funcional.
• Exceso de peso en la gestación.
• Malformaciones.
• Atraso del crecimiento intrauterino.

Finalización de la gestación

Los pacientes con una curva de crecimiento fetal normal, dado al buen control metabólico, se pueden proceder a la interrupción del embarazo a las 41 semanas de la inducción de trabajo de parto, con la respectiva prueba de bienestar fetal, en dichas condiciones se programará operación cesárea electiva.

Al finalizar la gestación, los niveles de glucosa sanguínea se verifican nuevamente de 6 a 12 semanas, para asegurar que llegan al rango normal, si cumple con el rango establecido, las posteriores pruebas se realizaran cada tres años, para el caso de la diabetes gestacional.

En la diabetes pregestacional, la vigilancia de los niveles de azúcar en sangre, se realizarán con regularidad, si hay alguna eventualidad en cuanto al cambio de horarias para la alimentación, lactancia y falta de sueño, los niveles de azúcar pueden afectar.

Recuerda acceder a Instagram @dra.haiyihe para que puedas continuar obteniendo información detallada sobre este y otros temas. ¡Contáctame!